- Es un jardín cerrado, aislado en lo posible del exterior, como si fuera un mundo aparte. Esto produce serenidad, relajación, calma controlada y también se contempla mejor.
- Ciérralo con láminas de brezo, cañizo, bambú, setos... siempre materiales naturales.
- Rocas de diferentes tamaños, colores y texturas. También piedras planas como lozas grandes.
- La arena o grava blanca simboliza el agua. Se rastrilla formando unas ondulaciones para reafirmar este simbolismo con el agua.
- Otros elementos característicos: estanques con peces, farolillos, recipientes, puentecillos, mobiliario de madera...
- En cuanto a plantas, son propias el Bambú, Cotoneaster, Rododendro, Azalea, Arce japonés (Acer palmatum), Viña ornamental (Vitis coignetiae), Hostas, Helechos, Estrelitzia, Lirios, Cerezo, Crisantemos, Glicinia...
- El musgo también, pero precisa humedad y sombra, por ejemplo en un rincón húmedo. El césped es parecido, pero no es tan auténtico. Otra alternativa para cubrir el suelo es la Dichondra repens.
domingo, 1 de marzo de 2009
El jardín japones
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